Los palés sirven para cargar, acumular y mover las mercancías que se pretenden exportar en un negocio de comercio exterior. Para conocer la cantidad, tipos y características de cada uno de ellos, hay que comprender que su uso dependerá del transporte que se utilice (marítimo, aéreo, terrestre o ferroviario).
Para el transporte de mercancía internacional, existen diversos estándares (estadounidense, de la Commonwealth) aunque el que más interesa al exportador español es el europeo o «Europaleta«.
Esta medida fue creada por la UE para adaptar el palé a las dimensiones de los contenedores de las cajas de los trailers, que tienen un ancho de 2.400, pudiéndose colocar dos palés en una dirección y tres en la otra, economizando el espacio hasta lograr colocar cinco palés distintos en un contenedor de transporte de mercancías.
Las medidas de los palés según esta norma, recogida en la UNE 49990, son las siguientes (en milímetros):
- 800×1200 para todos los productos de gran consumo (el realmente denominado «palé europeo»).
- 1000×1200 para los productos líquidos y químicos (reminiscencia de uso del palé americano).
- 600×800 en productos ultramarinos.
Sin embargo, los palés se diferencian a su vez por el material del que están compuestos.
Palés de madera
Acumulan el 95% de las exportaciones españolas, aunque es probable que su uso vaya reduciéndose, ya que recientes normativas internacionales demandan que se les realice tratamientos antibacterias si se venden las mercancías que contienen en una lista de países en la que figuran los Estados Unidos y muchos de los países del sudeste asiático.
Palés de metal
Soportan más peso en su carga y están fabricados por chapas de acero. Al contrario que en el caso de los de madera, su fabricación está menos estandarizada perdiendo con ello la capacidad de uso masivo, aunque son especialmente provechosos para el transporte de maquinaria pesada o materias primas en bruto (como hierro, acero o carbón).
Palés de plástico
Al igual que los de metal, su forma es variable y son muy utilizados en los transportes aéreos y envíos internacionales. Esto limita las posibilidades de rotura o desperfectos en su forma por un uso prolongado. También son muy utilizados en los almacenes industrializados y para todo tipo de logística interna. Además, son más higiénicos y limpios que los de madera.
Palés de cartón
Aunque a priori no lo parezca, son muy resistentes y cada vez son más usados para los envíos individualizados de empresas de distribución online como, por ejemplo, Amazon. Permiten un uso más personalizado y por las características del comercio exterior actual muchos apuntan que es el modelo del futuro.
Sea en barco o avión, de madera o de cartón, conocer los tipos de palés, los usos de cada uno y sus dimensiones es esencial para todo empresario que desee exportar o importar productos.
Es importante saber que en un contenedor de 20′ se pueden colocar once “europalés” por fila, mientras que en un 40′ veintitrés.
Además, en algunos casos los palés son reemplazados por slipsheets para ahorrar espacio, aunque también hay cargadores que no utilizan ninguno de los dos con el objetivo de maximizar la capacidad de carga de los contenedores.
En el siguiente gráfico vemos claramente la distribución.