El recargo ETS es un coste adicional aplicado al transporte marítimo como consecuencia de la inclusión de este sector en el Sistema de Comercio de Emisiones de la Unión Europea (EU ETS). Este recargo busca compensar las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por los buques y fomentar la descarbonización del transporte marítimo.
¿Por qué se ha implementado el recargo ETS?
La Unión Europea ha establecido el recargo ETS con el objetivo de reducir las emisiones del transporte marítimo en línea con los compromisos climáticos del Pacto Verde Europeo. El sector marítimo es responsable del 3% de las emisiones globales de CO₂, según datos de la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA), por lo que se ha convertido en una prioridad para alcanzar la neutralidad climática en 2050.
Desde enero de 2024, las navieras que operan en la UE deben comprar derechos de emisión por el 40% de sus emisiones de CO₂, porcentaje que aumentará progresivamente hasta el 100% en 2026. Este coste adicional se traslada a los clientes mediante el recargo ETS.
Impacto del recargo ETS en el transporte marítimo
La aplicación del recargo ETS tiene un impacto directo en los costes del transporte marítimo, afectando tanto a las navieras como a los importadores y exportadores.
Incremento en los costes de flete
Grandes compañías navieras han anunciado ajustes en sus tarifas debido al recargo ETS. Según varios estudios, el coste del transporte de contenedores podría aumentar entre un 5% y un 10% en rutas dentro de la UE.
Ejemplos prácticos
Para un envío de 40 pies entre España e Italia, el recargo ETS podría suponer un coste adicional de aproximadamente 7 euros por contenedor en 2024, con una tendencia al alza en los próximos años.
En rutas desde China a España, por ejemplo, el recargo varía según la naviera y el tipo de contenedor. Algunas compañías han establecido un recargo de 7 euros por contenedor estándar (TEU) en las rutas desde el sudeste asiático hasta el sur de Europa.
Además, los costes de envío desde China a España para un contenedor de 20 pies oscilan entre aproximadamente 1.600 y 2.500 euros, mientras que, para un contenedor de 40 pies, los costes pueden variar entre 2.700 y 4.500 euros.
Adaptación de las navieras
Para mitigar el impacto del recargo ETS, muchas navieras están apostando por estrategias de logística verde. Entre las principales acciones destacan:
- Uso de combustibles alternativos como metanol verde o gas natural licuado (GNL).
- Implementación de tecnologías para mejorar la eficiencia energética.
- Optimización de rutas para reducir el consumo de combustible.
Según la Organización Marítima Internacional (OMI), el uso de combustibles alternativos podría reducir hasta un 50% las emisiones de CO2 en 2050.
Repercusiones en la competitividad
El recargo ETS podría generar un efecto en cadena en la economía, encareciendo los productos transportados por vía marítima y afectando la competitividad de empresas exportadoras. Las industrias que dependen del transporte marítimo, como el sector automotriz y agroalimentario, podrían experimentar mayores costes logísticos.
Alternativas para reducir el impacto del recargo ETS
Ante este nuevo escenario, los operadores logísticos y las empresas que dependen del comercio marítimo pueden adoptar estrategias para minimizar el impacto del recargo ETS:
- Optimizar la planificación del transporte: Agrupar envíos y maximizar la utilización del espacio en contenedores para reducir los costes unitarios.
- Explorar rutas alternativas: Evaluar opciones de transporte multimodal (marítimo-ferroviario o marítimo-terrestre) para evitar los tramos más caros.
- Negociar con proveedores logísticos: Buscar acuerdos con navieras y transitarios que ofrezcan soluciones sostenibles y tarifas competitivas.
- Aprovechar incentivos fiscales y programas de sostenibilidad: Algunos países ofrecen ayudas para la transición ecológica en el sector del transporte.
Hacia un transporte marítimo más verde
El recargo ETS representa un desafío para el sector logístico y comercial, dado su impacto en los costes operativos. Sin embargo, también puede convertirse en una oportunidad para acelerar la transición hacia un transporte marítimo más sostenible.
Las empresas que adopten estrategias para reducir sus emisiones y optimizar su logística podrán mitigar los efectos del recargo ETS y mantener su competitividad en el mercado global. En este contexto, contar con un socio logístico experto es clave para adaptarse a los cambios normativos y minimizar costes. Contáctanos y optimiza tu logística de manera sostenible.
En CST Group, nos especializamos en la gestión de envíos internacionales y trámites aduaneros, con años de experiencia que nos respaldan.
